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domingo, 5 de septiembre de 2010

Fábula de la nube y la flor

Blog "Ataxia y atáxicos".

Por Bartolomé Poza Expósito, paciente de Ataxia de Friedreich, residente en Barcelona.

NOTA: Para ir al libro, de acceso gratuito, "Mi pequeño diario", escrito por Bartolomé Poza Expósito, paciente de Ataxia de Friedreich, hacer click en: http://www.miguel-a.es/BPMILI/

Fábula de la nube y la flor

Un lirio nació, un día,
en medio del pradal.
Sus raicillas tiernas
sorbían la humedad.
Y su alto tallo era
la copa que, al azar,
llenaba de rocío,
el duende matinal.
La brisa lo mecía,
brisa, que del mar,
subía fresca y suave,
dispuesta a acariciar,
cual invisible mano,
del invisible Pan.

Y, así, las mariposas
decíanle, al pasar:
“– ¡Muy buenos días, lirio!
Presumes y, en verdad,
que nadie es tan apuesto,
ni nadie, tan galán.
Tu aroma es exquisito...
tu cáliz, singular”
.
Con todo ello, el lirio
vivía en santa paz.

Al fin, llegó el verano,
y agosto, al fin, llegó,
sin nubes en el cielo,
ardía, intenso, el sol.
Secábanse los bosques
y tierras de labor...
los prados, agostados,
no daban ni una flor.
Y el pobrecito lirio
también languideció.

“– ¡Señor, cuánta sequía!
Sí dura esto, Señor,
de sed nos moriremos,
de sed y de calor”

Así se lamentaba
la gente, bajo el sol.

El lirio, con su copa,
marchita y sin llenar,
iba esperando, en vano,
al duende matinal.

Un día, por fortuna
–¡piedad, Señor, piedad!–,
apareció una nube
encima del pradal:
“– ¡Ay, nube generosa!
¡Quisiérasme auxiliar!
De sed me estoy muriendo...
sin agua, a no tardar,
seré una planta seca,
que el viento arrancará.
Con un poquito de agua,
contenta me verás”


La nube, ante sus quejas,
sintióse enternecer,
y así se habla a solas:
“Da lástima de ver.
Voy a satisfacerle,
voy a apagar su sed”
.
Hablaba todavía,
y ya empezó a llover.
Aquello fué un diluvio
sin arca de Noé.
Un río el prado era,
y el agua, a más correr,
lo arrastraba todo,
saltando por doquier.
Y cuando, tras largo rato,
la lluvia terminó,
y apareció en el cielo,
majestuoso, el sol,
del lirio no quedaba
ni rastro. -¡Qué dolor!-

Evita los excesos,
que hasta del bien, mal son
.

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Sección "PowerPoint del día":

Para visionar y/o guardar el archivo PowerPoint, hacer click en:
La leyenda del 600.

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1 comentario:

  1. ¡Precioso, Bartolomé!.

    Les vas a quitar el sitio a Samaniego, y a Iriarte :-). Sigue "trillando".

    Un abrazo.

    Miguel-A.

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